¿Han escuchado del festival de Tanabata? ¿De los adornos Fukinagashi?
El Tanabata es una celebración japonesa que al estar llena de simbolismo y belleza, cuenta con muchos elementos característicos, uno de ellos son los Fukinagashi.
En este post vamos a conocer algunos detalles sobre estos hermosos adornos.
¿Cuál es su origen?
Antes de hablar de los Fukinagashi, tenemos que conocer sobre el Tanabata que básicamente es un evento que celebra la reunión anual de dos amantes celestiales, Orihime y Hikoboshi.
Aunque la leyenda tiene sus raíces en la mitología china, se ha arraigado profundamente en la cultura japonesa.
En pocas palabras, esta leyenda cuenta que:
Orihime era una princesa celestial encargada de tejer hermosas telas, mientras que Hikoboshi era un hábil pastor. Ambos se enamoraron perdidamente y al pasar tiempo juntos, descuidaron sus deberes.
Al darse cuenta de esta situación, el padre de Orihime los separó, colocándolos a cada uno en lados opuestos de la vía láctea. Obviamente, la pareja quedó desconsolada y rogaron a los dioses para que les permitieran volver a estar juntos. Conmovidos por su amor, los dioses accedieron a que se reunieran pero solo una vez al año, el séptimo día del séptimo mes lunar.
¡Qué triste! ¿No creen?
Bueno, ¿Y qué son los Fukinagashi?
En realidad, representan los hilos de seda que la princesa Orihime utilizaba para tejer.
Adaptándose a la celebración, los fukinagashi son largas y coloridas cintas de papel que ondean al viento y es ahí cuando evocan la imagen de los hilos de seda.
Como pueden imaginarse, los japoneses han agregado a los fukinagashi como un elemento decorativo importante para la celebración por lo que en estas fechas se pueden ver por todos lados adornando las calles y los hogares. Además, hasta les han agregado elementos extra como borlas, pompones y figuras de papel que permiten enriquecer su significado y belleza.
¿Tienen otro simbolismo?
Los fukinagashi tienen mucha influencia en la cultura japonesa y algunos de los aspectos más representativos son:
Conexión celestial: Como expliqué anteriormente, son la representación de los hilos de seda de la princesa Orihime, simbolizan la conexión entre el mundo terrenal y el celestial.
Deseos y aspiraciones: Se piensa que al escribir un deseo y atarlo a uno de los adornos, será llevado al cielo y entregado a los dioses.
Habilidad artesanal: Son de gran importancia para la tradición artesanal japonesa, especialmente en la actividad de tejido.
Unidad y comunidad: La creación de estos adornos suele ser una actividad comunitaria, así que se considera que también permite fortalecer los lazos entre las personas.
¿Cómo se elaboran?
Aunque parece fácil en realidad no es tan sencillo pues también involucra un proceso creativo y comunitario.
Siguiendo la tradición, se deben utilizar largas tiras de un papel de alta calidad conocido como washi. Estas tiras se unen para formar cintas de varios metros de largo, que luego se decoran con diversos elementos significativos.
Pero si, la decoración también es un proceso importante y es que suele ser una expresión artística que varía según la región y las preferencias personales.
Algunos de los elementos decorativos más comunes incluyen:
Tanzaku: Son pequeñas tiras de papel en las que se escriben deseos.
Kusudama: Son esferas decorativas hechas de papel.
Figuras de papel: Suelen representar animales, personas u objetos relacionados con la leyenda del Tanabata. Sin embargo, en últimos años hasta se han agregado elementos de la cultura pop como Pikachu y Hello Kitty.
Borlas y pompones: Agregadas para dar un toque de color y movimiento.
¿Cuál es su aceptación en la actualidad?
A pesar de sus raíces antiguas, el Tanabata y los fukinagashi continúan evolucionando, incluso ya es una celebración mucho más elaborada y comercial que atrae a infinidad de turistas anualmente.
Lo más importante es que al final, la esencia sigue siendo la misma pues es una celebración de belleza, amor y esperanza. Además, los fukinagashi, con sus colores vibrantes y simbología, siguen siendo una parte integral de esta festividad.
Recientemente visité un shotengai en la ciudad de Yamanashi y casualmente encontré todo el camino repleto de estos bellos adornos.
Les comparto un poco de ese momento.
En conclusión,
Los fukinagashi son un bellísimo testimonio del rico patrimonio cultural de Japón y un símbolo de la capacidad de las personas para crear belleza y esperanza. Además, esta celebración permite conectar con las tradiciones japonesas e incluso, expresar deseos para un futuro lleno de felicidad y armonía.
¿Qué piensan de los fukinagashi? ¿Conocían sobre la leyenda del Tanabata?
Recuerden que pueden revisar mis redes sociales para descubrir más detalles sobre Japón.
Como siempre, muchas gracias por leer y revisar mi blog Hola Nihon. Abrazos!!